Cómo aliviar la comezón de las manos y los pies en la noche

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Tratar la comezón nocturna en casa

Prevenir la comezón de las manos y los pies en la noche

Utilizar tratamientos médicos

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Referencias

La comezón en las manos y los pies, también llamado prurito, puede ser un síntoma de diversos problemas dermatológicos como el sarpullido alérgico, la soriasis o la dermatitis. Podría ser doloroso y extremadamente irritante, y es posible que tu piel esté áspera, roja o con bultos y ampollas. Además, es posible que notes que la picazón empeora por las noches. Si tienes comezón de las manos y los pies, entonces es importante que recibas el diagnóstico de un médico. Sin embargo, también hay algunas cosas que puedes probar en casa para aliviar las molestias que provoca la comezón en las manos y los pies.

Pasos

Método 1

Método 1 de 3:

Tratar la comezón nocturna en casa

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   Trata de no rascarte. Evítalo lo más que puedas. Rascarte la piel puede agravar los síntomas o provocar otros problemas, como una infección.

   • Tener las uñas cortas puede ayudarte a no rascarte.
   • Piensa en usar guantes en la noche y mientras duermes para que no puedas hacerlo.
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   Hidrátate la piel. Hidrata la piel de tus manos y pies antes de irte a acostar para contribuir a que la comezón disminuya o no aparezca. Puedes reforzar la humectación utilizando un humedecedor en tu habitación.

   • Aplícate humectante en la piel al menos una vez al día. El mejor momento para hacerlo será después de una ducha o un baño, mientras tu piel esté mojada. Concentra el humectante en las áreas donde sientas más escozor después de la ducha y antes de acostarte.
   • Asegúrate de utilizar un humectante sin aroma ni color que no te irrite la piel.
   • Tener un humedecedor en tu habitación garantizará que el aire esté húmedo y no seque tu piel, lo que hace que quieras rascarte mientras duermes.
   • Evita extremos de temperaturas, pues podrían secarte la piel.
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   Sumérgete en un baño de agua tibia. Tomar un baño con agua tibia puede aliviar la comezón en la piel y contribuir a disminuir la inflamación. Considera agregar una preparación coloidal de avena para aliviar aún más la piel.

   • Rocía el agua con bicarbonato de sodio, o avena sin cocer o coloidal, que contribuirán a aliviar la piel.
   • Quédate en la bañera solo de 10 a 15 minutos. Cuando permaneces mucho tiempo en la bañera, tu piel puede ponerse seca, lo que a su vez podría causar más comezón.
   • Asegúrate de que el agua esté templada y no caliente. Esta última puede quitarle los aceites naturales a tu piel, y hacer que se seque y que la comezón sea aún peor.
   • Después de tomar un baño, frótate loción en la piel antes de que esté completamente seca, concentrándote en tus manos y pies. Esta medida fijará la humedad del baño en tu piel, lo que la mantendrá hidratada y, así, será menos probable que sientas comezón.
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   Aplícate una compresa fría o húmeda. Colócate una compresa helada, fría o húmeda sobre tus manos y pies antes de irte a dormir. Las bolsas o compresas frías pueden aliviar la comezón y la inflamación que se asocia al prurito al restringir el flujo sanguíneo y enfriar la piel.

   • Puedes ponerte una compresa fría en los sarpullidos de manera intermitente durante 10 a 15 minutos o hasta que te quedes dormido.
   • Si no tienes una bolsa de hielo, puedes utilizar una de verduras congeladas para conseguir el mismo efecto.
   • No dejes que el hielo esté en contacto directo con tu piel. Asegúrate de envolver el hielo o la bolsa de hielo con un paño. Si este entra en contacto directo con tu piel por demasiado tiempo, podría provocarte quemaduras por congelación.
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   Ponte un pijama holgado y suave. Evita y alivia la comezón con un pijama que no irrite tu piel. Esta prenda también puede servirte para que no te la rasques más.

   • Utiliza un pijama fresco, holgado y suave hecho de algodón o lana merino para no rascarte y evitar el exceso de sudoración.
   • La ropa de algodón es buena porque deja pasar el aire a través de la tela y es suave al contacto.
   • Piensa en utilizar calcetines y guantes para evitar la comezón.
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   Crea un ambiente cómodo y frío para dormir. Duerme en una habitación cómoda, fresca y bien ventilada. Controlar factores como la temperatura y la oscuridad, tener ropa de cama cómoda y hacer que el aire circule podría lograr que no te dé comezón en las manos y los pies.

   • Programa la temperatura de la habitación en 16 a 24 °C (60 a 75 °F) para que tus condiciones de sueño sean óptimas.
   • Utiliza un ventilador para que el aire circule o abre una ventana.
   • Duerme en sábanas cómodas de fibras naturales como el algodón.
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   Revisa tu piel para ver si presenta síntomas de una infección. Cuando tienes manos y pies secos y con comezón, puedes estar en mayor riesgo de contraer una infección cutánea superficial, también conocida como celulitis. Si nota alguno de los siguientes síntomas, llama a tu médico inmediatamente:

   • enrojecimiento
   • hinchazón
   • dolor o sensibilidad
   • piel que se siente caliente al tacto
   • fiebre
   • manchas rojas, hoyuelos o ampollas
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Método 2

Método 2 de 3:

Prevenir la comezón de las manos y los pies en la noche

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   Ten un cuidado adecuado de las manos y los pies. Lávatelos de manera regular para reducir el riesgo de presentar infecciones fúngicas y bacterianas, que pueden provocar una comezón muy fuerte. Utiliza un jabón suave, que será suficiente para mantener tus manos y pies limpios, y evitar infecciones.

   • Si tus pies suelen sudar mucho, utiliza calcetines absorbentes de algodón para evitar la comezón en esta parte del cuerpo.
   • Ponte guantes hechos de fibras naturales como el algodón para evitar la comezón.
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   Escoge jabones y detergentes para lavar ropa que sean suaves o “hipoalergénicos”. Cuando compres estos productos, elige los que indiquen que son suaves, sin aroma, sin tintes o hipoalergénicos, pues estos tendrán menos químicos nocivos que podrían irritarte la piel y provocarte comezón.

   • Cualquier producto que diga “hipoalergénico” ha pasado una prueba para pieles sensibles y no te la irritará.
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   Evita los alérgenos e irritantes. El prurito puede ocurrir debido a un alérgeno o irritante en específico. Si sabes qué te provoca los episodios de comezón, podrás evitar el elemento irritante y no sentir más molestias.

   • El desencadenante podría ser un alérgeno, un alimento, un cosmético, un factor ambiental, la mordedura de un insecto, o un detergente o jabón fuertes.
   • Si utilizas joyas, la comezón podría ser producto de una alergia que tengas a algunos de los metales que tenga.
   • Si sospechas de un desencadenante en específico, trata de restringir tu exposición a este elemento y fíjate si esto alivia tus síntomas.
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   Mantente hidratado. Cuando sientes comezón en la piel, se envía una señal a tu cerebro que le indica que necesitas más agua. Esto se debe a que la comezón a menudo es provocada por la deshidratación. De igual manera, si la capa interna de tu piel no recibe la humedad necesaria, podría provocarte una sensación de comezón. Bebe agua durante el día y no olvides tomar un vaso entero antes de irte a acostar.

   • Trata de beber al menos entre 8 y 12 vasos de agua al día. Si te aburre el agua, agrégale un poco de jugo para darle sabor.
   • También puedes consumir alimentos con un alto contenido de líquido como el pepino, la cereza, el tomate, el apio, el pimiento verde, la sandía, la fresa, el melón y el brócoli.
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   Evita los irritantes y alérgenos conocidos. Tu condición podría empeorarse si te expones a probables irritantes como los químicos y el polen. Si sabes a qué eres alérgico, como a los alimentos y el polvo, haz tu mayor esfuerzo por alejarte de estos elementos.

   • Si no sabes a qué eres alérgico, ve a un alergista que te hará algunas pruebas para descubrir a qué sustancias les tienes alergia.
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   Cuídate de los vasodilatadores y la sudoración excesiva. Algunos alimentos y bebidas que son conocidos como vasodilatadores, como el café y el alcohol, pueden empeorar la comezón. La sudoración excesiva tiene el mismo efecto. Evitar los vasodilatadores y las situaciones que hacen que sudes de manera abundante podría ayudarte a reducir la comezón y las molestias.

   • Algunos vasodilatadores comunes son la cafeína, el alcohol, las especias y el agua caliente.
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   Disminuye el estrés. Tener un exceso de estrés en tu vida podría empeorar la comezón. Tratar de disminuir el estrés en tu vida podría contribuir a reducirla o aliviarla por completo.

   • Puedes utilizar diversas técnicas para disminuir el estrés como la terapia, la meditación, el yoga o los ejercicios.
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Método 3

Método 3 de 3:

Utilizar tratamientos médicos

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   Ve al médico. Si después de una semana la comezón no disminuye o se vuelve muy molesta, ve al doctor, quien podría prescribirte medicamentos orales, cremas con cortisona o fototerapia con este propósito.

   • Ve al doctor si la comezón te incomoda tanto que altera tu sueño o tu funcionamiento en el día, te duele la piel, los remedios caseros y de autocuidado no han funcionado o sospechas que tienes una infección en la piel.
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   Aplicarte una loción de calamina o una crema para aliviar la comezón. Usar lociones de calamina o cremas de venta libre para la comezón mejorará sus síntomas. Puedes comprarlas en tiendas de alimentos y farmacias, personalmente o por Internet.

   • Una crema de venta libre para aliviar la comezón o de hidrocortisona contribuirá a aliviarla. Compra una que contenga al menos 1 % de hidrocortisona.
   • Busca cremas para aliviar la comezón que contengan alcanfor, mentol, fenol, pramoxina y benzocaína.
   • Aplícate estas cremas en las manos y los pies antes de humectarte la piel. Tal vez tu médico te recomiende aplicarte la crema en el área afectada y luego cubrirla con una venda húmeda para contribuir a que tu piel la absorba de manera más efectiva.
   • Sigue las instrucciones específicas del producto para saber la frecuencia con que puedes utilizar esta crema en tu piel.
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   Ingiere antihistamínicos orales de venta libre. Estos medicamentos neutralizan los alérgenos, y alivian la comezón y la inflamación de la piel. Existen diversos antihistamínicos de venta libre que puedes comprar en farmacias o tiendas de alimentos, personalmente o por Internet.

   • Puedes conseguir clorfenamina de 2 y 4 mg. Puedes tomar 4 mg cada 4 a 6 horas. No excedas los 24 mg al día.
   • Puedes conseguir difenhidramina de 25 y 50 mg. Puedes tomar 25 mg cada 4 a 6 horas. No excedas los 300 mg al día.
   • Estos medicamentos tienen un efecto sedativo como beneficio adicional, que podría ser útil si tienes problemas para dormir.
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   Piensa en tomar antidepresivos. Se ha comprobado que los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) podrían aliviar el prurito. Habla con tu médico sobre esta opción si otros tratamientos no surten efecto.

   • Los ISRS que se utilizan comúnmente para tratar la comezón de la piel son la fluoxetina y sertralina.
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   Frota corticoides de prescripción en las áreas en las que sientes comezón. Cuando esta no se alivia aplicando un corticoide tópico de venta libre, tu médico podría prescribirte uno más fuerte de administración tópica u oral como la prednisona.

   • Los corticoides orales tienen efectos secundarios graves cuando se utilizan por un periodo prolongado.
   • Sigue humectándote la piel cuando utilices corticoides orales y tópicos. Hacerlo no solo mantendrán tu piel hidratada, sino que podría evitar la comezón después de descontinuar el uso de los corticoides.
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   Utiliza una crema inhibidora de calcineurina. Si ningún otro tratamiento te hace efecto, consigue una de estas cremas, que contribuyen a restaurar la piel. Estos medicamentos, como el tacrolimus y pimecrolimus, pueden contribuir a mantener la normalidad de la piel y reducir la comezón.

   • Los inhibidores de calcineurina afectan directamente al sistema inmunológico e implican posibles efectos secundarios como problemas renales, presión arterial elevada y dolores de cabeza.
   • Estos medicamentos solo se prescriben cuando otros tratamientos no surten efecto y se permite su uso en personas mayores de dos años.
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   Sométete a la fototerapia. Es posible que el médico te indique someterte a varias sesiones de fototerapia (terapia de luz) para aliviar la comezón. Este tratamiento muy efectivo puede consistir en algo tan simple como exponerte de manera controlada al sol o a la luz artificial, aunque no está libre de factores de riesgo.

   • La fototerapia expone a la piel a cantidades controladas de luz solar natural o rayos artificiales ultravioleta UVA y UVB, de ondas más estrechas. Este tratamiento se puede utilizarse solo o junto con medicamentos.
   • La exposición a la luz incrementa el riesgo del envejecimiento prematuro y el cáncer a la piel.
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Consejos

• Habla con tu dermatólogo sobre la comezón que sientes en la piel. La mejor manera de curarla es primero saber por qué ocurre y, luego, tratar el problema.

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