Cómo hacer puré de pollo para bebés

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En este artículo:

Cocinar el pollo

Hacer un puré de pollo básico

Agregar otros sabores

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Referencias

Según la Academia Americana de Pediatría, los bebés pueden empezar a comer pollo tan pronto como estén listos para los alimentos sólidos (por lo general de 4 a 6 meses de edad). El puré de pollo no solo es suave y fácil de comer para los bebés, sino que también es una fuente fantástica de vitaminas y minerales esenciales, como el hierro y el zinc. Para preparárselo a tu bebé, tendrás que cocinar el pollo antes de agregarlo a una licuadora o un procesador de alimentos con un poco de líquido. Puedes hacer que el puré tenga más sabor y sea más nutritivo al agregarle especias, jugo o la fruta o el vegetal favoritos de tu bebé.

Ingredientes

• 1 o 2 muslos de pollo cocidos sin pellejo ni hueso
• de 4 a 6 cucharadas de agua, caldo de cocción o jugo
• 1 pizca de hierbas o especias suaves, como el ajo molido, el romero o el perejil (opcional)
• 1/4 de taza (45 g) de frutas o vegetales cocidos al vapor (opcional)

Pasos

Parte 1

Parte 1 de 3:

Cocinar el pollo

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   Elige pollo de carne oscura por su alto contenido de hierro. Los bebés que toman leche materna se beneficiarán al comer alimentos ricos en hierro y zinc. La carne de pollo blanca es más magra, pero la oscura es una mejor opción para tu bebé porque es más rica en hierro y antioxidantes. Elige un corte de carne oscura como los muslos o las piernas.

   • La mayoría de las leches en fórmula están fortificadas con hierro y otros micronutrientes importantes, por lo que no es tan esencial que los bebés que las consuman obtengan el hierro adicional presente en la carne oscura. Pregúntale al pediatra cuál es la mejor opción para tu bebé, la carne oscura o la blanca.
   • Los muslos de pollo también son muy ricos en grasa, en comparación con las pechugas, lo que les da más sabor y las vuelve más fáciles de convertir en puré.
   • Necesitarás 1 o 2 muslos para preparar alrededor de 1/2 taza (aproximadamente 65 g) de pollo cocido. Un solo muslo de 170 g (6 oz) con pellejo y hueso brindará alrededor de 85 g (3 oz) de carne, pero necesitarás más si vas a usar muslos pequeños.
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   Retira todos los huesos y el pellejo del pollo. Si es posible, compra carne de pollo a la que ya le hayan quitado el hueso y el pellejo. Si no la consigues, pela el pellejo y retira los huesos.

   • El pellejo de pollo no es muy bueno para hacer puré. Si lo dejas, podría dejar pedazos grandes en el puré, lo que podría hacer que el bebé se atore.
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   Corta la carne en pedazos pequeños. Antes de cocinar el pollo, usa un cuchillo afilado para cortarlo en cubos pequeños. Coloca el pollo en una tabla de picar y córtalo en tiras de un ancho aproximado de 1,5 cm (1/2 pulgada), luego corta a lo ancho de las tiras para hacer cubos.

   • Si colocas el pollo en la congeladora por 15 minutos antes de cortarlo en tajadas, será más fácil de cortar.
   • Siempre ten cuidado cuando uses un cuchillo afilado. Mantén las yemas de los dedos encogidas cuando sujetes el pollo en su lugar, así no te cortarás por accidente.
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   Cubre el pollo con agua o caldo en una olla. Coloca el pollo cortado en una olla y vierte agua suficiente como para cubrir la carne por completo. Usar caldo le dará al pollo un sabor más enriquecido, pero este también producirá su propio caldo durante el proceso de cocción.

   Consejo: si prefieres, puedes asar el pollo o cocinarlo en una olla de cocción lenta en lugar de escalfarlo. Ten en cuenta que podrías tener que agregarle más líquido al pollo asado para crear un puré suave.
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   Hierve el líquido en la olla. Coloca la olla en la cocina y enciende la hornilla a fuego medio. Cubre la olla y espera a que el líquido empiece a hervir.

   • El tiempo que se requiera variará según la cantidad de líquido que haya en la olla. Revisa la olla con frecuencia para no perder la noción del tiempo y cocinar el pollo en exceso.
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   Reduce la intensidad y hierve el pollo a fuego lento por 15 a 20 minutos. Cuando el líquido empiece a hervir, reduce la intensidad a fuego lento. Cubre la olla y deja que el pollo hierva a fuego lento hasta que ya no esté rosado y los jugos salgan claros al cortarlos. Esto deberá tomar alrededor de 15 a 20 minutos.

   • No cocines el pollo en exceso; de lo contrario, se volverá duro y gomoso.

   1. • Asegúrate siempre de que el pollo esté completamente cocido a una temperatura interna de 74 ºC (165 ºF), de lo contrario no será seguro comerlo.
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Parte 2

Parte 2 de 3:

Hacer un puré de pollo básico

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   Reserva de 4 a 6 cucharadas del caldo de cocción. Para obtener un puré suave, tendrás que agregar un poco de líquido. Guarda un poco del caldo para que puedas agregarlo a la licuadora o al procesador de alimentos cuando hagas el puré de pollo.

   • Si usas el caldo de cocción, esto agregará sabor y ayudará a restablecer parte de los nutrientes que se pierdan durante el escalfado.

   Consejo: si tu bebé no ha comida pollo antes, usar el caldo podría hacer que el sabor sea demasiado fuerte. Si no le gusta el sabor, haz un puré de pollo con agua o jugo.
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   Vierte 1/2 taza (65 g) de pollo cocido en una licuadora o un procesador de alimentos. Toma el pollo en cubos cocido y colócalo dentro del tazón del procesador de alimentos o en la licuadora. Si acabas de cocinar el pollo, espera unos minutos para que se enfríe.

   • Espera a que el pollo esté lo suficientemente frío como para poder tocarlo sin problemas.
   • ¡Arma bien la licuadora o el procesador de alimentos antes de agregar el pollo al tazón!
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   Agrega 2 o 3 cucharadas de líquido. Antes de empezar a licuar, agrega un par de cucharadas de caldo al tazón. Esto humedecerá el pollo y ayudará a crear un puré suave.

   • No agregues todo el líquido de una sola vez. Quizás no necesites todo, y agregar demasiado puede hacer que quede líquido.
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   Coloca la tapa de la licuadora o el procesador de alimentos. No presiones ningún botón hasta que la tapa esté ajustada en su lugar. De lo contrario, ¡terminarás con un gran desastre!

   • Algunos procesadores de alimentos tienen un tubo que permite agregar ingredientes adicionales mientras la máquina está activada. Si no tienes esta función, tendrás que detener la máquina y destaparla para agregar más líquido u otros ingredientes.
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   Presiona el botón pulsador hasta que el pollo quede licuado en trozos. En lugar de activar directamente la opción de puré, presiona el botón pulsador un par de veces para cortar la carne en pedazos más pequeños.

   • Usar esta función será de utilidad para garantizar que el pollo se licúe de manera uniforme.
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   Tritura el pollo hasta que esté suave. Activa la función de “puré” y licúa el pollo y el caldo hasta alcanzar una consistencia suave. Revisa de vez en cuando para determinar si la textura es la adecuada, y verifica que el puré no tenga pedazos ni esté irregular.

   • Este proceso solo debe tomar unos minutos, pero el tiempo que necesites podría variar según la licuadora o el procesador.
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   Añade el resto del líquido de forma gradual si es necesario. Si no hay suficiente líquido, el puré podría lucir seco o granulado. Si crees que necesita más líquido, agrega cantidades pequeñas de caldo o agua poco a poco, hasta que tengas la textura que deseas.

   • No agregues demasiado, para que el puré no quede líquido.
   • Si este se vuelve muy líquido, podrás espesarlo al agregar más pollo.
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Parte 3

Parte 3 de 3:

Agregar otros sabores

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   Reemplaza el agua o el caldo con jugo para crear un sabor diferente. Si a tu bebé no le gusta el sabor del puré de pollo puro, usar un líquido diferente puede ayudar a ocultarlo o mejorarlo. Usa un poco de jugo de manzana o uva blanca en lugar de caldo o agua, o mezcla el jugo y el caldo.

   • Usa jugo 100 % libre de edulcorantes para no darle demasiada azúcar a tu bebé.
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   Agrega algunas hierbas o especias suaves para obtener un sabor extra. Quizás no estés seguro de darle a tu bebé algo con especias, pero experimentar con una variedad de sabores y texturas lo ayudará a desarrollar un gusto más aventurero. Agrega una pizca de un aderezo suave (como la pimienta negra, el ajo en polvo, la albahaca o el romero) para mejorar el sabor del puré.

   • Al principio usa una cantidad pequeña de todo aderezo, así el bebé podrá acostumbrarse al nuevo sabor.
   • Pruébalo cuando tu bebé ya haya probado el puré de pollo puro y solo experimenta con un aderezo a la vez. Si tu bebé es alérgico a un alimento o aderezo, esto hará que sea más fácil determinar qué ingredientes evitar en el futuro.

   Consejo: puedes agregarle hierbas frescas o secas a la comida de tu bebé. Si usas hierbas frescas, asegúrate de triturar bien las hojas para que no haya pedazos grandes con los que tu bebé pueda asfixiarse.
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   Agrega la fruta o el vegetal favoritos de tu bebé para darle nutrientes adicionales. Puedes hacer que tu puré sea incluso más sabroso y nutritivo al combinar el pollo con una variedad de frutas y vegetales. Antes de hacer puré con frutas o vegetales, córtalos en cubos pequeños y cocínalos hasta que estén tiernos.

   • Cocinar al vapor las frutas o los vegetales en lugar de hervirlos hará que tengan un mejor sabor y conserven una mayor cantidad de sus nutrientes.
   • Agrega aproximadamente 1/4 de taza (alrededor de 45 g) de las frutas o los vegetales cocidos a la licuadora o el procesador de alimentos junto con el pollo.
   • Combina el pollo con manzanas, peras, zanahorias, batatas, arvejas o espinaca.
   • Solo experimenta con un nuevo ingrediente a la vez, de modo que puedas determinar con facilidad a qué alimentos es alérgico tu hijo.
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Consejos

• Puedes guardar el puré de pollo de forma segura en la refrigeradora hasta por 24 horas, o en la congeladora hasta por un mes. Cuando alimentes a tu bebé, desecha toda comida sobrante que se haya contaminado con una cuchara usada o que tu hijo haya tocado.

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Cosas que necesitarás

• cuchillo de cocina afilado
• olla
• licuadora o procesador de alimentos