Cómo fastidiar a tus hermanos

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En este artículo:

Fastidiar a uno de tus hermanos

Hacerle bromas

Ser ruidoso odioso

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Referencias

Los hermanos pueden ser tus amigos más fieles, pero eso no quiere decir que no sea divertido fastidiarlos de vez en cuando. Si quieres divertirte un poco a la antigua y fastidiar a uno de tus hermanos, hay muchas maneras en que puedes hacerlo, ¡pero ten cuidado, pues podría devolvértelo y hacerte lo mismo!

Pasos

Método 1

Método 1 de 3:

Fastidiar a uno de tus hermanos

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1. 
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   Síguelo a cualquier lugar al que vaya. Si te pregunta qué haces, solo ignóralo o dile “Nada”. Si sale de casa, síguelo afuera. Si se encierra en un dormitorio, espera afuera de la puerta y recuérdale constantemente que estás ahí. Cada 2 o 3 minutos, dile algo como “Oye, sigo aquí. No me he ido, ¡no te preocupes!”.

   • Si tus padres pasan por ahí, finge que vas a tu dormitorio o que vas a tomar un bocadillo de la cocina.
2. 
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   Repite todo lo que diga con una voz de pito. Si lo comprende y te pregunta qué haces, solo repítele la pregunta. Si se siente frustrados y te dice “Eres muy molesto, deja de hacerlo”, tú también dile “Eres muy molesto, deja de hacerlo” con una voz de pito. ¡Eso lo volverá loco!
3. 
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   Roba su comida de su plato en la cena cuando no te esté viendo. Espera hasta que se dé cuenta de que le falta parte de su comida y luego finge que no tienes idea de lo que habla. Si no lo comprende, dile “Vaya, cálmate. ¿Por qué comes tan rápido?”.

   • ¡Asegúrate de ser astuto para que tus padres no te atrapen!
4. 
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   Moléstalo cuando esté con sus amigos. Si está viendo televisión con sus amigos, párate frente al televisor para que no puedan ver y exígeles atención. Si está en su dormitorio con sus amigos, golpea la puerta hasta que te dejen entrar. SI no lo hacen, deja notas debajo de la puerta con palabras o dibujos al azar. Al final, podrían rendirse y dejarte entrar.

   • Si nada funciona, saca álbumes de fotos antiguas y muéstrales a sus amigos fotos vergonzosas de tu hermano cuando era un bebé.
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Método 2

Método 2 de 3:

Hacerle bromas

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1. 
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   Esconde el celular de tu hermano y luego llámalo. Espera a que se distraiga viendo televisión o haciendo tarea y luego toma su celular sin que lo note. Escóndelo en un lugar donde se demore una eternidad en encontrarlo. Después, llama a su celular para que empiece a sonar y llámalo una y otra vez mientras corre de un lado a otro buscándolo. Mientras más se demore en encontrarlo, más fastidiado se sentirá.

   • Ocúltalo en una caja de comida en una alacena o al fondo de un cajón.
   • Ocúltalo en un lugar que amortigüe el sonido para que se demore bastante en encontrarlo.
2. 
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   Escóndete en su dormitorio y salta para asustarlo. Ve debajo de su cama o métete en su clóset cuando no esté en su dormitorio. Luego, cuando entre y se acomode, sal y grita algo como “¡Te atrapé!”.

   • Si te escondes debajo de su cama, puedes tomar su pierna cuando pase para asustarlo.
3. 
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   Desconecta el wifi cuando use su computadora. Busca el módem en tu casa y desconéctalo. Luego, espera a que tu hermano empiece a preguntarte. Cuando lo haga, finge que no sabes de lo que habla. Dile que el wifi funcione bien para ti. Terminará pensando que algo funciona mal en su computadora.

   • Después de 10 o 15 minutos, ponle al corriente de tu broma. Dile algo como “Ah, sí, olvidé que desconecté el wifi. ¡Ups!”.
   • Asegúrate de que tus padres no usen el wifi o podrías meterte en problemas.
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   Reacomoda su dormitorio cuando no esté en casa. Cambia sus muebles de lugar para que no se encuentren en el mismo sitio. Saca todo de sus estantes y escritorio y reacomódalos de formas divertidas. Sé lo más rápido posible para que no te descubra cuando llegue a casa.

   • Vuelve a hacer su cama de forma que sus almohadas estén en la parte final de la cama, donde normalmente están sus pies.
   • También puedes voltear todas las sillas de su dormitorio.
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Método 3

Método 3 de 3:

Ser ruidoso odioso

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   Despierta a tu hermano temprano en la mañana con un ruido fuerte. Métete en su dormitorio mientras esté dormido y acércate a su oreja. Luego, aplaude o grita para despertarlo. En cuanto se despierte, ve corriendo a tu dormitorio y métete en tu cama. Cuando te haga frente al respeto, solo dile “Nunca lo hice. Debes de haber estado soñando”.

   • Lleva una cuchara y olla de metal, y golpéalas juntas si quieres ser más fastidioso.
2. 
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   Pon en alto una canción que no le guste. Coloca los parlantes en el espacio en el que se encuentre tu hermano para que sea más ruidoso. Si se encierra en su dormitorio, colócalos en el pasillo afuera. Hazlo cuando tus padres no estén en casa para que no los molestes ni te metas en problemas.

   • Si tu hermano odia la música country, busca una canción country y ponla en repetición con el volumen alto.
   • Poner música clásica podría ser una manera excelente de volverlo loco.
3. 
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   Grita en su oído cuando esté hablando por teléfono. Acércatele sigilosamente y grita en su oído para que no pueda escuchar a la persona con la que habla. Si se marcha, síguelo y continúa molestándolo. Si quieres distraerlo aún más, dale un codazo mientras lo fastidies: solo tendrá una mano libre para detenerte.
4. 
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   Canta una canción una y otra vez frente a él. No le respondas mientras lo hagas: solo sigue cantando como si estuvieras en lo tuyo. Canta una canción repetitiva y monótona para que sea aún más fastidioso. Al final, se molestará bastante contigo.

   • Si quieres ser más fastidioso, ni siquiera cantes toda la canción. Solo canta una línea de la canción una y otra vez, como “Pasito a pasito, suave, suavecito; pasito a pasito, suave, suavecito; pasito a pasito, suave, suavecito…”.
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