Cómo dejar de completar lo que las personas dicen

¿Notas que sueles completar lo que las personas dicen y hacer que reaccionen mal por ello? Ellas pueden tolerar este hábito las primeras veces, pero si ocurre con frecuencia, puede volverse molesto y perjudicar las relaciones interpersonales. Sin embargo, tal vez no te hayas dado cuenta de que en realidad es algo normal. Este puede ser un signo de inseguridad, impaciencia, emoción o comprensión por parte de quien lo hace.^{[1]XFuente de investigación} Asimismo, podría ser un signo del trastorno por déficit de atención con hiperactividad, o TDAH.^{[2]XFuente de investigación} No obstante, si reconoces que tienes un problema y aprendes a concentrarte en lo que los demás dicen, podrás abandonar este hábito.

Parte 1

Parte 1 de 3:

Practicar el silencio para dejar de interrumpir a los demás

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Pide ayuda. Si sabes que tienes un problema grave con este hábito, pídeles ayuda a tus familiares y amigos. Indícales que sabes que lo haces y pídeles que te lo señalen cuando interrumpas las conversaciones. Esto podría hacer que estés más consciente del comportamiento y te ayudará a abandonarlo poco a poco.^{[3]XFuente de investigación}
- Recuerda que tus familiares y amigos estarán felices de ayudarte, y no hay nada de malo con mencionarles el problema. Esta es una medida que te ayudará a detener un mal hábito. Si tener conversaciones de “alta participación” es parte de la cultura de tu familia, podrías tener que pedirles a tus amigos o incluso a los compañeros de trabajo cercanos que te indiquen si completas lo que los demás dicen.
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Escucha una canción en silencio. Antes de interactuar con las personas, escucha una de tus canciones favoritas sin hacer ruido. Podría parecerte difícil, pero puede ayudarte a concentrarte en mantenerte callado durante las conversaciones.^{[4]XFuente de investigación}
- Prueba esta técnica en otras situaciones. Si un amigo o familiar está hablando por teléfono, tan solo siéntate y no digas nada. Responde en tu mente si es necesario, pero concéntrate en tu persona y en no decir nada.
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Escribe lo que quieras decir. En muchos casos, puedes realizar este comportamiento porque no quieres olvidar algo ingenioso que quieres decir como respuesta. Puedes memorizarlo para luego retomar este punto cuando la persona termine, o escribir en un papel lo que querías decir para no olvidarlo.^{[5]XFuente de investigación}
- Usa esta técnica en entornos formales o incluso con amigos si tienes muchas dificultades para detener este hábito. Puedes decir “Estoy tratando de mejorar mi capacidad de concentrarme en lo que las personas dicen, en lugar de reaccionar a ello”.
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Responde en tu mente. Si estás participando en una conversación o escuchando algo que te interesa, date la oportunidad de “responder” en tu mente. Asegúrate de que la persona termine de hablar por completo antes de responderle en silencio. Esto parece difícil, pero determinar cuándo debes empezar a responder es un paso vital. Una vez que respondas en tu mente, determina si el momento es adecuado para responder en persona.^{[6]XFuente de investigación}
- Asiente con la cabeza o tan solo di “Sí” mientras la persona habla, pero nada más. Además de reforzar tu deseo de no hablar, esto también le muestra que estás prestando atención a lo que dice.
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Respira o toma una pausa antes de hablar. Durante una conversación, respira profundo y trata de esperar hasta estar totalmente seguro de que la persona ha terminado de hablar. Respirar profundo un par de veces puede ayudar a ralentizar la mente y recordarte que respires antes de hablar. Una respiración es una pausa natural que puede ayudar a garantizar que la otra persona termine de hablar.^{[7]XFuente de investigación}
- Toma un respiro largo antes de empezar a responderle. Si sigue hablando cuando terminas de inhalar y exhalar, toma otro respiro. Repite este procedimiento hasta que la persona termine.
- Muérdete la lengua con suavidad si respirar no te funciona o el sonido perjudica la conversación.
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Parte 2

Parte 2 de 3:

Concentrarte en las conversaciones para no interrumpirlas

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Recuérdate que debes guardar silencio. Una vez que hayas practicado el acto de dejar de interrumpir a los demás, será el momento de salir al mundo real. Siempre que inicies una conversación, existirá el peligro de completar lo que la persona diga. Recuerda que debes dejar que las personas hablen y piensa en tu respiración o en morderte la lengua para detener el mal hábito.^{[8]XFuente de investigación}
- Ten en cuenta que, incluso si no tenías malas intenciones al interrumpir, ella podría percibirlo de esa manera. Si te preocupa lo que piense de ti, ten en cuenta que permanecer en silencio un segundo más no te perjudicará y en realidad podría ayudarte a largo plazo.
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Presta mucha atención. Para saber cuándo hablar o no, debes prestarle mucha atención a la conversación. Escuchar a otra persona de forma activa te ayudará a concentrarte en ella y puede evitar que completes sus oraciones en momentos inoportunos.
- Coloca la mano debajo del mentón como recordatorio de que debes escuchar antes de hablar.
- Observa los hábitos de la persona. ¿Tu amigo siempre mantiene la puerta abierta para los demás? Esto puede demostrarte que es amable y considerado.
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Pregúntale si ha terminado de hablar. Si te gustaría decir algo, pero no sabes con certeza si ha terminado de hablar, considera preguntarle. Busca una manera amable de formular la pregunta, lo que le mostrará que en verdad estás interesado en lo que tiene que decir.^{[9]XFuente de investigación}
- Observa su boca para notar si ha terminado el enunciado o la oración. Dile “¿Hay algo más que te gustaría decir sobre ello? Tienes algunos puntos fantásticos y quiero decirte algo que pienso que puede contribuir con tu punto de vista”.
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Pide disculpas por interrumpir. Si notas que realizas este mal hábito, pide disculpas por interrumpir. Si lo haces las veces suficientes, podrías detener este comportamiento. Esto también le mostrará que ella y lo que tiene que decir te importan lo suficiente como para esperar.^{[10]XFuente de investigación}
- Dile “Lamento mucho haberte interrumpido. Me emocioné mucho por el tema y no quise ofenderte”.
- Explícales a las personas que provienes de una cultura en la que el intercambio rápido y completar lo que la otra persona dice son aspectos comunes. Diles que estás tratando de mejorar al respecto y que lamentas interrumpirlas.
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Parte 3

Parte 3 de 3:

Reconocer el problema

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Observa las reacciones de las demás personas. En toda conversación, es importante que les prestes atención a las personas con las que converses. Si te preocupa completar lo que los demás dicen con mucha frecuencia o que esto cause problemas en tus relaciones, nota cómo reaccionan los demás cuando practiques este mal hábito. Sus reacciones pueden indicarte si tienes un problema y si está afectando sus relaciones.^{[11]XFuente de investigación}
- Ten en cuenta que, incluso si solo tratas de demostrar tu emoción o intimidad completando lo que la otra persona dice, quizás este no sea el mensaje que expreses. En lugar de expresar algo como “Lo sé y te entiendo muy bien”, la persona podría pensar “Estás poniendo palabras en mi boca”.
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Reflexiona sobre el motivo por el que interrumpas a los demás. Hay diversos motivos por los cuales puedes realizar este comportamiento. Sin embargo, no todos ellos son negativos. Tal vez lo hagas porque te emocionas por la conversación o es algo que forma parte de tu cultura. Si determinas por qué realizas este comportamiento, esto puede ayudarte a admitir con más facilidad que tienes un problema.
- Considera tu trasfondo. Muchas culturas (incluida la de Europa Oriental, la mediterránea, la africana y la árabe) tienen un tipo de conversación llamada “de alta participación”. Esto significa que completar lo que la otra persona dice es una manera de establecer una relación. Si has crecido en alguna de estas culturas, esto podría explicar por qué tienes este hábito.^{[12]XFuente de investigación}
- Ten en cuenta que las mujeres son más propensas a hacerlo. Al igual que con algunas culturas del mundo, esta también es una manera de establecer un vínculo entre las personas.
- Considera otros factores que influyan en este hábito. ¿Eres tímido y tienes dificultades para expresarte con seguridad o tener una conversación de otra manera? ¿Tienes dificultades para concentrarte en la otra persona? ¿Eres impaciente cuando la persona tarda en expresar su punto?
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Admítelo. Es probable que sepas que sueles completar lo que dicen los demás. Esto podría ocurrir en situaciones familiares (como una reunión de familia) o incluso en entornos formales (como las reuniones de trabajo). De cualquier modo, tal vez el mayor obstáculo para detener el hábito sea admitir que lo practicas.
- Recuerda las conversaciones que has tenido con las personas en el pasado y cómo han transcurrido. ¿Has aprovechado una pausa en la conversación, has intervenido en ella o directamente has completado lo que la otra persona ha dicho? Si reconoces las maneras en las que interrumpes, esto puede indicarte lo malo que sea tu problema.^{[13]XFuente de investigación}
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Consejos

Recuerda relajarte mientras escuchas a la persona hablar y cuando tomes la palabra. Esto podría ser de más utilidad para detectar toda situación en la que practiques el mal hábito.
No esperes demasiado para participar en la conversación, ya que quizás nunca tengas la oportunidad de decir algo ingenioso o esclarecedor.

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