Cómo sonreír para una fotografía

La primera regla que debes aprender para sonreír para una fotografía es no decir “cheese.” Cuando haces el sonido correspondiente a las letras “ee”, estrechas tu boca de forma tal que obtienes una sonrisa poco natural. Es mejor decir una palabra que termine en el sonido inglés “uh” o /ʌ/, como “panda” o “banana.” Si te interesa encontrar más consejos como este para conseguir una sonrisa bella y sincera frente a la cámara, continúa con el siguiente artículo.

Método 1

Método 1 de 3:

Practicando tu pose

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1
Sonríe con tu mirada. Cuando se trata de fotografías, lo peor que puedes hacer es sonreír como si fueras una calabaza de Halloween: puros dientes, pero con la mirada vacía. Para que tu sonrisa luzca auténtica, debes acompañarla con la mirada. De esta forma, obtendrás lo que se denomina una “sonrisa de Duchenne.” Una “sonrisa de Duchenne” es natural y auténtica, ya que implica el movimiento de los músculos que rodean los ojos, algo que solo ocurre cuando verdad estás feliz o pensando en algo divertido.
- Mira la diferencia en un espejo. ¿Ves que no luces tan feliz si no sonríes con tu mirada?
- Cuando sonríes para una fotografía, imagina que le sonríes a alguien que quieres. Tus ojos se moverán de forma convincente y tendrás una sonrisa bella y auténtica.
No es necesario que sonrías ampliamente mientras luces todos tus dientes, pero mostrarlos un poco ayudará a que tu sonrisa ilumine tu rostro. Trata de mostrar solo los dientes de la parte superior de tu boca en vez de tratar de mostrarlos todos. Si prefieres una sonrisa sin separar los labios, está bien. Solo recuerda que probablemente luzcas más seria que el resto de personas que salga en la fotografía.
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Encuentra tu mejor ángulo. Mirar de frente a la cámara es una pose que no favorece a todos. Esta pose reduce los rasgos faciales y provoca una imagen algo distorsionada. En vez de hacer esto, luce tu silueta volteando tu cabeza un poco hacia un lado. Si tienes lo que se denomina un lado “bueno”, es decir, un lado que favorece tus rasgos, entonces lúcelo frente a la cámara.
- Si bien tu rostro puede verse favorecido si volteas un poco, no exageres el movimiento u obtendrás una pose forzada. Asegúrate de que tu rostro se encuentre en un ángulo que lo haga lucir natural.
- Si es posible, ubícate un poco por debajo de la cámara para que esta apunte hacia esa abajo en vez de hacia arriba.
Si metes la barbilla, la forma de tu rostro saldrá distorsionada. Si por el contrario, la levantas y sacas la barbilla, entonces parecerá que tratas de ocultar una papada. La posición más natural es mantener tu rostro al mismo nivel de la cámara, tal y como si fueras a tener una conversación con el aparato.
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Di una palabra que termine en el sonido inglés “uh” o /ʌ/. A muchos fotógrafos les gusta que sus clientes digan la palabra “cheese”, pero esto resulta en malas fotografías por dos razones. Primero, el sonido de las letras “ee” hace que estreches tu boca de forma tal que obtienes una sonrisa que poco natural, una sonrisa “falsa.” Segundo, tu sonrisa no lucirá auténtica a menos que en verdad estés alegre. Cuando los fotógrafos piden a cualquier persona mayor de 8 años que diga “cheese” (o cualquier otra palabra, como “whiskey” o “patata”), lo único que consiguen es molestarla. Entonces, ¿cuál es la solución? Piensa en algo que te resulte agradable y recuerda decir el sonido “uh” (/ʌ/). Este sonido en particular hace que los labios formen una sonrisa natural. Pensar en alguien que ames también genera una sonrisa natural, y si aplicas ambos métodos, ¡entonces tendrás la sonrisa más hermosa de todas!^{[1]XFuente de investigación}
- Por ejemplo, si tu enamorado se llama “Elijah”, piensa en él y di su nombre mientras sonríes para la cámara. Pensar en cualquier persona, lugar u objeto que te haga sentir feliz funcionará igual de bien mientras te haga sonreír.
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Método 2

Método 2 de 3:

Refrescando tu sonrisa

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Tu mejor sonrisa surgirá en parte por la confianza que sientas en tu apariencia. Si tus dientes están sucios, entonces no querrás mostrarlos. Asegúrate de cepillarlos y limpiarlos con hilo dental, así como hacerles una limpieza profesional para que mantengan su mejor apariencia.^{[2]XFuente de investigación}
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Deja tus dientes brillantes usando métodos de blanqueamiento. Si tus dientes están amarillos u opacos, blanquéalos. Así sonreirás con confianza. No hay necesidad de pasar por un tratamiento costoso para blanquearlos. Puedes hacerlo por ti misma en tan solo unos pocos minutos mediante una técnica de blanqueamiento natural. A continuación, te mostramos cómo hacerlo:
- Enjuaga tus dientes con peróxido de hidrógeno (agua oxigenada). Es un compuesto químico natural y seguro que dejará tus dientes más blancos.
- Cepilla tus dientes con bicarbonato. Agrega un poco de pasta de dientes o haz una pasta con bicarbonato y agua. No la uses muy a menudo o podrías deteriorar el esmalte de tus dientes.
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Usa un lápiz de labios que brinde un aspecto perlado a tus dientes. Algunos tonos de lápiz de labios atenúan el color amarillo de los dientes y los hacen lucir más brillantes y blancos. Puedes favorecer tu sonrisa si usas los siguientes tonos antes de una fotografía:
- Variedades de rojo intenso, como el rojo baya intenso. Estos tonos contrastarán con tus dientes y los harán resaltar.
- Variedades de subtonos de azul. Atenuarán el color amarillo de tus dientes.
- No uses tonos anaranjados o amarillos, ya que resaltarán el amarillo de tus dientes y atenuarán tu sonrisa.^{[3]XFuente de investigación}
Los labios secos pueden hacerte sentir incómoda, por lo que no saldrías bien en la fotografía. Usa un exfoliante facial en tus labios y aplica bálsamo labial y brillo para mantenerlos en buen estado. De esta manera, no tendrás que preocuparte por cómo lucen cuando llegue el momento de sonreír.
Si aplicas base, colorete y bronceador cosmético, puedes hacer que tu sonrisa resalte aún más. Elige tonos que combinen con tu color de piel. Tus dientes se verán más blancos si usas maquillajes oscuros que te hagan lucir como si estuvieras bronceada.
Sonreír no se trata verse perfecta, sino de verse feliz y segura. Tu sonrisa se verá mejor si irradias confianza y paz. Si te preocupas demasiado por tu apariencia, se notará en tu rostro y acabarás por salir tensa e incómoda en tus fotografías. Solo recuerda estar tranquila y pensar en algo alegre. De esta manera, obtendrás la mejor fotografía.
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Método 3

Método 3 de 3:

Manejando situaciones complicadas

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Si tienes un evento donde se tomarán fotografías y estás nerviosa, lucirás incómoda en las fotografías. Tómate un tiempo antes para practicar tu sonrisa. Mírate en el espejo y encuentra tu mejor ángulo, así como la medida exacta en que debes abrir tus labios. No te olvides de sonreír con la mirada. Cuando encuentres tu sonrisa ideal, recuerda la sensación en tu rostro para que puedas replicar esa expresión cuando quieras.
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Muestra una sonrisa auténtica. Si te preocupa que la expresión de tu rostro no luzca sincera en las fotografías, presta atención al momento en que sientas que sonríes con sinceridad, como cuando alguien hace una broma o cuando te mueres risa con tu comedia favorita. Hazte las siguientes preguntas que te ayudarán a recordar cómo te sientes cuando sonríes con sinceridad:
- ¿Qué sentimientos fluyen en tu cerebro cuando sonríes de verdad? Mira si puedes recrear esa sensación cuando te encuentres frente a la cámara.
- ¿Qué posición toma tu rostro cuando sonríes de verdad? Si es posible, mira en el espejo antes de que tu sonrisa desparezca y recuerda la imagen de tu sonrisa verdadera. Cuando llegue el momento de tomarte una fotografía, trata de recrear la posición de tu rostro para ofrecer tu mejor sonrisa.
Si sueles cerrar tus ojos a medias o completamente durante las fotografías, intenta el siguiente truco para mantenerlos abiertos y alertas. Antes de que te tomen la fotografía, cierra tus ojos durante un segundo completo o dos antes de abrirlos y sonreír. De esta manera, es menos probable que sientas necesidad alguna de cerrar tus ojos cuando veas la luz del flash.
Si tus dientes lucen un poco opacos, existe una forma rápida para hacerlos lucir mejor: justo antes de sonreír, pasa tu lengua sobre tus dientes para mojarlos bien. Aunque tus dientes luzcan solo un poco más brillantes después, lucirán mejor que si los tuvieras secos. El brillo de tus labios evitará que se vean opacos. Algunos maquilladores recomiendan frotar un poco de vaselina en la parte frontal de los dientes para que sea vean parejos y brillantes durante una sesión fotográfica.
Si te preocupas de tu aspecto, es posible que lo expreses en tu rostro cuando sonrías. Acabarás por verte tensa y nerviosa en vez de natural y feliz. La próxima vez que estés frente a una cámara, ignora las indicaciones de ánimo que te dé el fotógrafo (como decir “cheese”) y adéntrate en tu propio “espacio de felicidad.” En vez de pensar en qué tan raro se vea tu rostro, piensa en algo que solo pueda hacerte sonreír. Tus pensamientos positivos se reflejarán en tu rostro y harán brillar tu sonrisa.
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