Cómo memorizar tus líneas

¿Te olvidas con frecuencia tus líneas? ¿Se te hace difícil recordar el guion en un lapso breve de tiempo? Los miembros del elenco que olvidan sus líneas suelen ser una molestia y una carga para los demás actores. Para ayudar al elenco, al director y a ti mismo, es necesario que memorices tus líneas y tus entradas.

Parte 1

Parte 1 de 4:

Prepararte con el guion

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Resalta o subraya tus líneas para que no tengas que revisar todo el guion con el fin de encontrarlas.
- Si es necesario, toma notas, como que tan fuerte o suave debes hablar, si debes bajar o subir la velocidad, y así sucesivamente.
- Puede ayudar que anotes o encierres en un círculo las entradas para hablar.
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Lee el guion hasta que tengas una comprensión total del argumento de la obra. Esto significa comprender la intención de tu personaje (qué es lo que quiere), sus obstáculos (qué es lo que impide que obtenga lo que quiere) y sus tácticas (qué es lo que hace para obtener lo que quiere) y la emoción que representa (la energía, si está triste, feliz o entusiasmado). Los directores quieren saber si tienes emoción y energía. De esta manera, si olvidas tus líneas durante la función, podrás inventar algo que decir para que el público no se dé cuenta.
- Trata de fingir que eres ese personaje por un día y adopta exactamente su personalidad.
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Parte 2

Parte 2 de 4:

Aprender las líneas

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Escríbelas. Esta idea se explica por sí misma, escribe las líneas repetidamente. Esta medida hace que las líneas se metan en la memoria subconsciente. Para ahorrar papel, también puedes escribirlas en una computadora y luego simplemente borrarlas y empezar de nuevo.
- Escríbelas con la otra mano. Si eres diestro, escribe las líneas con la mano izquierda y viceversa. Al usar la mano con la que estás menos familiarizado, tu cerebro debe pensar tres veces más en lo que escribes.^{[se necesita una fuente]}
Si tu tarea consiste en subir al escenario con una toalla, pregúntate por qué el personaje hace algo así. También puedes meterte en el personaje pensando profundamente en la razón por la que actúa de la manera en que lo hace. Incluso puedes inventar una historia de fondo para el personaje (qué es lo que ocurrió antes del guion y qué es lo que sucederá después).
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Practica leyendo las líneas en voz alta. Di la entrada, la línea y la línea que sigue. Hazlo con una sección o una página a la vez. Ponte a prueba después de cada página para asegurarte de que recuerdes lo que acabas de aprender.
- Di las líneas de distintas maneras. Si las líneas invitan a la tristeza, dilas alegremente; si invitan al susurro, dilas gritando. Usa distintas emociones. Es posible que te rías con algunas de las opciones, lo cual puede ayudarte a recordar esa oración.
- Si tienes un monólogo, trata de repetir una o dos oraciones a la vez. Luego añade otra oración. Cuando hayas acabado unas cinco oraciones de esa manera, repítelas un poco para asegurarte de que las recuerdes.
- Usa a tu favor la proyección (volumen) y la inflexión (hablar con expresión).
Trata de dominar partes pequeñas del guion a la vez. Es difícil memorizar todas las líneas al mismo tiempo. Al tomar partes pequeñas del guion, puedes añadir líneas una a una hasta memorizarlo todo. Una buena manera de trabajar es repasar escena por escena.
Esta medida puede ayudar si te gusta cantar; de este modo, será como cantar una canción normal a medida que las leas posteriormente. Además, esta táctica programará esa canción en tu cerebro para siempre, así que nunca olvidarás las líneas.
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Piensa en la tarea o llévala a cabo cuando digas las líneas. Tu cerebro retiene mejor la información cuando el recuerdo se asocia con la acción.
Si estás cansado de ensayar, relájate. Esto ayudará a tu cerebro a funcionar mejor. Además, trata de hacer algo de ejercicios para contribuir con la relajación de tu cerebro.
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Parte 3

Parte 3 de 4:

Practicar con otras personas o con una ayuda de audio

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Practica con un compañero. Pídele a la otra persona que lea el guion mientras lo repasas con ella. Pídele que resalte o que encierre en círculos las partes que hayas omitido o en donde hayas confundido las palabras.
- Si no tienes un compañero, hay muchas aplicaciones telefónicas que pueden ayudarte a memorizar y a ensayar las líneas. Por ejemplo, prueba la aplicación gratuita Line Please.
Pídeles que miren el guion y recítales las líneas.
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Graba las líneas. Usa un reproductor de MP3 o algo para grabarte mientras lees todas las líneas (con espacios de silencio en los que se suponga que debas hablar). Luego, puedes reproducir la grabación mientras manejas o haces ejercicio, y decir tus líneas de memoria. Aprenderás tus líneas y también las líneas de entrada de los demás actores. Es como aprender las letras de una canción, mientras más la escuches, mejor podrás "cantar" junto con la grabación.
- Grábalas en el teléfono (una oración a la vez) y reprodúcelas una y otra vez. Luego únete y, por último, trata de decir tus líneas sin la grabación.
- Graba la obra entera y cuando debas leer tu línea, no digas nada. Luego reproduce la grabación para que puedas decir tus líneas. Será como si practicaras con el elenco.
- Al practicar con un amigo o con un familiar, pídele que lea las líneas del otro papel para que sepas cuando intervenir sin mirar el guion.
- Esta medida no solo te ayudará a recordar tus línea, también te ayudará a recordar tus entradas.
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Parte 4

Parte 4 de 4:

Ensayar solo por última vez

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Si puedes practicar antes de que la función empiece, hazlo.

Consejos

Si hay partes del guion en las que te equivoques con frecuencia, resáltalas. Luego repásalas y pregúntate por qué el personaje diría o haría eso. Al agregar ideas, memorizas sin darte cuenta.
Recuerda, si alguna vez te equivocas durante la noche de la actuación, dilo mal pero con fuerza. El publico no notará la diferencia.
Aprende también la última palabra de la línea de entrada para que sepas cuando intervenir.
Lee el guion antes de ir a la cama. Al hacerlo, tu cerebro mantendrá las líneas presentes.
Algunas veces, el solo hecho de saber tus líneas no es suficiente. Si algo ocurre, lo cual significa que debes improvisar, debes saber el comienzo, el medio y el final de la escena para que puedas volver a encaminarte.
Recuerda la primera y la última línea. Si las sabes, entonces puedes improvisar. Trata de recordar una o dos palabras de cada oración o de algunas oraciones para que tengas la idea general de lo que debes decir.
Escribe las líneas en notas adhesivas y distribúyelas por toda la casa para verlas y leerlas durante el día.
Escribe a mano o en una computadora las líneas. Tendrás que leerlas con atención a medida que lo hagas, lo cual te ayudará a recordarlas.
Trata de imprimir una versión del guion y resalta a tu personaje con un color. Luego, puedes escoger un color adicional para resaltar todas las partes importantes.
Pídele a alguien que sostenga el guion y trata de leer las líneas sin verlo para que la otra persona verifique si estás en lo correcto.

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Advertencias

Trata de tomar descansos entre el aprendizaje y el ensayo.
Nunca te salgas del personaje. Eso hace que sea extremadamente difícil volver a tu posición y recordar tus líneas.
No te olvides de llevar el guion a los ensayos.
No te asustes. El miedo escénico pertenece al pasado. ¿A quién le importa si te equivocas? El público no se dará cuenta, así que sigue adelante y diviértete.
No te esfuerces demasiado o perderás la ilusión de la obra.

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