Cómo limpiar y lubricar una puerta corrediza de vidrio

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En este artículo:

La Manera Minuciosa

La Manera Rápida

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Las puertas corredizas de vidrio pueden llegar a ser difíciles de abrir porque el canal puede acumular tierra y escombros. Los pasos que te mostraremos a continuación te enseñarán cómo mantener tu puerta de cristal suavemente corrediza.

Pasos

Método 1

Método 1 de 2:

La Manera Minuciosa

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Usa al menos una vez al año este método para limpiar profundamente y lubricar el canal para deslizar la puerta. Si tienes una puerta de pantalla, primero quítala—–se puede levantar y volver a poner fácilmente en el canal.

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   Quita las cortinas, persianas o cualquier mueble que este cerca de la puerta.
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   Sujeta a cada extremo de la puerta. Empuja la puerta hacia arriba de manera que las ruedas que están al fondo de la puerta puedan salir del canal. Probablemente tengas que usar un desatornillador para aflojar los tornillos de las ruedas del umbral del fondo para que puedan salir fácilmente.
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   Mantente presionando la puerta hacia arriba. Jalándola hacia ti al mismo tiempo hasta que salga del marco de la puerta.
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   Coloca la puerta sobre dos caballetes para que puedas limpiar las ruedas del canal.
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   Usa un cepillo de alambre para aflojar el cabello y tierra acumulados en las ruedas.
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   Usa una aspiradora para el escombro de las ruedas del fondo y el tope de la puerta.
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   Aplica un lubricante de silicón antiadherente en las ruedas.
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   Prueba los rodillos para asegurarte de que están libres de escombro y pueden rodar libremente.
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   Limpia con una aspiradora el canal.
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    Limpia el canal de la puerta con un trapo húmedo.
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    Aplica algo de lubricante a los canales de la puerta antes de que la vuelvas a poner.
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    Levanta la puerta de los caballetes. Pon ahora la parte de arriba de la puerta dentro del canal superior.
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    Presiona la puerta hacia arriba para que los rodillos de abajo puedan librar el umbral inferior.
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    Permite que los rodillos caigan dentro del canal inferior. Si hay algunos tornillos flojos, apriétalos antes de volver a poner la puerta. Para asegurarte de que la puerta esté acomodada verticalmente.
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    Desliza la puerta hacia atrás y adelante hasta que te asegures de que lo haga suavemente.
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Método 2

Método 2 de 2:

La Manera Rápida

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Si el canal de tu puerta corrediza no está demasiado engomado con suciedad y mugre, puedes volver a dejarla suave al deslizarla en aproximadamente 15 minutos.

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   Aspira profundamente el canal de la puerta mientras todavía está cerrada.
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   Desliza la puerta hasta abrir la completamente para que puedas tener acceso al otro lado del canal.
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   Raspa la suciedad y los escombros del canal con un destornillador de cabeza plana.
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   Aspira la tierra suelta usando el adaptador con punta estrecha de la aspiradora.
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   Usa un trapo viejo para aplicar cantidades generosas de lubricante antiadherente en ambos lados del canal de la puerta corrediza.
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   Desliza la puerta para abrir y cerrarla varias veces de manera de que todo el canal que lubricado. Probablemente tendrás que abrir y cerrar la puerta por varios minutos antes de que quede suave el deslizarse.
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Consejos

• Limpia el canal de tu puerta corrediza cada tantos meses con un cepillo de alambre. El cepillo te servirá para aflojar esos tercos depósitos de tierra, que después podrás aspirar.
• Asegúrate de limpiar ambos lados del canal de la puerta.
• También es de gran ayuda que lubriques los canales de las puertas corredizas cada tantos meses.

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Advertencias

• Lo mejor es que tengas un ayudante si vas a quitar la puerta de los canales. Si tienes que aflojar los tornillos, tu ayudante te puede ayudar a asegurarte de que la puerta no se caiga antes de que la remuevas.
• Trata de evitar lubricantes grasosos ya que éstos atraen más la mugre y el polvo; tendrás que limpiar los rodillos y los canales mucho más seguido si usas este tipo de lubricantes grasosos y aceitosos en lugar de los antiadherentes.

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Cosas que necesitarás

• Aspiradora
• Cepillo de alambre
• Espray lubricante
• Desatornillador de cabeza plana (opcional)