Cómo limpiar las manchas de sal de la calle del calzado de cuero

Muchas veces (especialmente durante los meses de invierno cuando hay lluvias y nieve), la sal de las calles se impregna en los zapatos de cuero dejando grandes manchas blancas. Si no quitas estas manchas, el cuero quedará seco y agrietado en forma permanente e incluso podrían aparecer marcas de burbujas. Por lo tanto, es importante quitar esas manchas del calzado de cuero lo más rápido posible para evitar un mayor daño. Lee el paso 1 a continuación para comenzar.

Método 1

Método 1 de 2:

Limpia los zapatos

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Utiliza vinagre y agua. Un excelente producto casero para eliminar las manchas de sal de los zapatos de cuero, es una solución de agua y vinagre.
- Simplemente mezcla dos partes de agua con una parte de vinagre en un frasco pequeño. Sumerge un trapo limpio y suave en la solución y úsalo para limpiar cuidadosamente la sal de la superficie de los zapatos.
- Elimina la solución de vinagre con un trapo mojado con agua y luego seca los zapatos con una toalla limpia^{[1]XFuente de investigación}.
2
Utiliza jabón para cuero. El jabón para cuero es un excelente producto para limpiar zapatos de cuero y generalmente está hecho de ingredientes 100% naturales.
- Aplica una pequeña cantidad de jabón para cuero en una esponja húmeda y frótala sobre el cuero haciendo movimientos circulares.
- Utiliza un paño limpio y seco para pulir los zapatos y quitar el exceso de jabón para cuero.
- Si estás interesado en hacer tu propio jabón para cuero en tu casa, lee un artículo en How.com.vn que explique cómo hacerlo.
Muchas tiendas de zapatos o de reparación de zapatos venden una pequeña botella de quitamanchas químicos específico para manchas de sal. Son muy efectivos y alcanzan para varias aplicaciones. Utilízalos siguiendo las instrucciones de la etiqueta.
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Método 2

Método 2 de 2:

Evita un mayor daño

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Deja que los zapatos se sequen. Si tus zapatos están mojados además de estar manchados con sal, es importante dejar que se sequen completamente para evitar un daño permanente.
- Coloca las botas en un lugar seco y cálido, lejos de cualquier fuente directa de calor como radiadores u hogares. Secar los zapatos rápidamente puede dañarlos incluso más que el agua.
- Quítales las suelas a los zapatos si no están pegadas y rellénalos con papel de diario. Esto acelerará el proceso de secado y ayudará a que los zapatos conserven su forma.
- Reemplaza el papel de diario húmedo con papel de diario seco cada dos horas para que se sequen aun más rápido.
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Acondiciona el cuero. La sal puede realmente secar el cuero, así que es importante acondicionar bien tus zapatos después de que hayan estado expuestos a la sal para que recuperen la humedad que perdieron.
- Pule un poco los zapatos usando acondicionador o loción para cuero comprado en una tienda. Esto suavizará el cuero y te ayudará a revertir los efectos de la sal.
- Si no tienes a mano ningún acondicionador para cuero, un par de gotas de aceite de oliva también servirán. Frota una ligera capa de aceite de oliva sobre la superficie del zapato usando un paño suave.
- Repite el proceso cada unas pocas horas hasta que el cuero parezca no absorber más aceite. Limpia el exceso de aceite con un paño seco.
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Usa algún producto impermeabilizante. Compra algún producto impermeabilizante diseñado especialmente para cuero.
- Esto te ayudará a proteger los zapatos tanto del daño de la sal como del agua. El agua de hecho extrae la sal del mismo cuero, así que puede ser tan dañina como la sal.
- En efecto, debes aplicar este producto en todos los zapatos de cuero nuevos que compres para prevenir anticipadamente que ocurra el daño^{[2]XFuente de investigación}.
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