Cómo cuidar de tu chihuahua

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En este artículo:

Alimentar a tu chihuahua

Acicalar a tu chihuahua

Brindarle cuidado veterinario preventivo

Ejercitar a tu chihuahua

Entrenar a tu chihuahua

Estar atento a los problemas de salud de tu chihuahua

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Referencias

Los chihuahuas son perros pequeños que tienen grandes personalidades. También son muy leales a sus dueños, lo que permite desarrollar un vínculo especial y duradero entre ambos. Aprender a cuidar adecuadamente a tu chihuahua no solo te permitirá mantenerlo feliz y saludable, sino que también te ayudará a crear un vínculo fuerte y duradero con tu mascota.

Pasos

Parte 1

Parte 1 de 6:

Alimentar a tu chihuahua

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   Elige un alimento seco para perros que sea alta calidad. Darle a tu chihuahua la dieta adecuada hará que luzca y se sienta bien durante toda su vida. Debido a que existen muchas alternativas alimenticias disponibles, puede ser abrumador elegir la mejor para tu chihuahua. Busca un alimento seco que contenga aproximadamente de 30 a 33 % de proteínas.

   • Debido a que una dieta con alto contenido de sal puede contribuir a la aparición de problemas renales y cardiacos en los perros pequeños, el alimento que elijas debe tener un contenido bajo de este mineral.
   • Consulta con tu veterinario o criador de chihuahuas renombrado para que te brinde recomendaciones adicionales con respecto a los alimentos secos de alta calidad.
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   No alimentes a tu chihuahua en exceso. La obesidad es un problema importante en esta raza. La enorme personalidad y gran nivel de energía de tu chihuahua pueden hacerte alimentarlo con una cantidad mayor que la necesaria, lo que puede dar lugar a la obesidad.

   • Comienza alimentándolo con la cantidad recomendada en la bolsa de comida, pero también aprende a evaluar el nivel físico de tu perro y supervisa su peso. Revisa ambos aspectos con regularidad y, si está aumentando de peso, disminuye la cantidad de comida que le das en un 5 o 10 %.
   • Debido al tamaño pequeño de tu chihuahua, incluso un bocadillo adicional puede aumentar una cantidad significativa de calorías en su dieta diaria, lo que a la larga puede provocar obesidad.
   • La alimentación excesiva puede provocar otros problemas médicos graves, como un desarrollo óseo anormal, problemas de la piel, artritis, enfermedad cardiaca y diabetes.
   • La cantidad de alimento que le des a tu chihuahua puede depender de varios factores, tales como la edad, el nivel de actividad y las necesidades médicas específicas. Consulta con tu veterinario en caso de que no estés seguro de la cantidad de comida que debas darle a tu chihuahua.
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   Infórmate sobre lo que no debes darle de comer a tu chihuahua. No alimentes a tu chihuahua con comida humana, en especial con sobras de comida. Las comidas humanas específicas que debes evitar son las carnes curadas (p.ej., tocino, jamón), los productos lácteos, chocolate, uvas y cebollas.

   • Los productos lácteos pueden provocar diarrea en los perros.
   • Las uvas son tóxicas para los perros y pueden provocar una insuficiencia renal.
   • Las cebollas pueden provocar un daño en los glóbulos rojos de los perros.
   • El chocolate también es tóxico para estos animales y puede provocar síntomas como diarrea, hiperactividad y temblores.
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   Fija un horario de alimentación para tu chihuahua. Debido a que el chihuahua tiene un estómago pequeño, no puede comer grandes cantidades al mismo tiempo. Se recomienda alimentarlo varias veces al día. Es probable que los chihuahuas sumamente pequeños (menos de 1,3 kg o 3 lb) necesiten alimentarse cada 4 horas. Los chihuahuas de mayor tamaño pueden recibir alimento de 2 a 3 veces al día.

   • La frecuencia con la que alimentes a tu perro también depende de su edad, nivel de actividad y necesidades médicas.
   • Prueba diferentes horarios para alimentar a tu chihuahua hasta determinar el más adecuado para ambos.
   • En lugar de alimentar a tu perro exactamente a la misma hora a diario, hazlo dentro de un rango de tiempo general. Esto puede evitar que tu mascota se vuelva demasiado exigente a la hora de la comida.
   • Deja que tu chihuahua coma por 15 a 20 minutos y aleja a los demás durante la hora de la comida. Tu perro no debe sentir que tiene que defender su alimento.
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   Supervisa los problemas de tu chihuahua relacionados con su dieta. El chihuahua puede presentar síntomas físicos de problemas relacionados con su dieta. Un indicador físico evidente es la obesidad. En lugar de tener una condición física ideal (p.ej., cintura visible, costillas ligeramente evidentes, un vientre orientado hacia arriba y que se mete desde su pecho hasta la parte trasera), la obesidad le dará una apariencia regordete.

   • La piel grasosa, escamosa y seca también es un indicador de problemas con la dieta.
   • Si tu chihuahua tiene un pelaje opaco o los ojos apagados, podría tener una insuficiencia alimenticia.
   • Las heces anormales (diarrea, heces muy duras) pueden indicar la presencia de problemas con la dieta.
   • Si sospechas que tu chihuahua tiene problemas relacionados con su dieta, programa una cita con el veterinario para consultar sobre los posibles cambios en su alimentación.
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Parte 2

Parte 2 de 6:

Acicalar a tu chihuahua

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   Cepilla a tu chihuahua. Los chihuahuas tienen pelajes lisos o largos. El pelaje liso es aterciopelado, brillante y está pegado al cuerpo del perro. Por su parte, los pelajes largos son lacios a ligeramente rizados, con flecos en las piernas y la cola empenachada. Los chihuahuas con cualquier tipo de pelaje pierden pelo (por lo general, en la primavera y el otoño), pero es algo muy manejable.

   • Si tienes un chihuahua con pelaje liso, cepíllalo 1 vez a la semana con un guante de acicalamiento de goma o un cepillo de cerdas suaves. Ten en cuenta que las cerdas deben ser de un material natural.
   • Los chihuahuas que tienen pelaje largo generalmente necesitan un cepillado más frecuente de por lo menos 2 veces a la semana, aunque lo ideal sería que lo hagas a diario. Utiliza un cepillo de púas.
   • Utiliza un peine para pulgas de dientes finos y quita los pelos muertos y sueltos.
   • Un peine de acero inoxidable te servirá para desenredar el pelo.
   • Puedes adquirir materiales de acicalamiento en una tienda de mascotas local.
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   Baña a tu chihuahua. Si cepillas a tu chihuahua con frecuencia, no necesitarás bañarlo. Por lo general, es recomendable bañarlo 1 vez al mes o cada 2 meses, a menos que haya estado en un lugar maloliente.

   • Solo utiliza un champú seguro para perros. El champú para humanos puede quitarle los aceites esenciales a la piel de tu mascota.
   • Baña a tu chihuahua con agua tibia.
   • Al terminar de bañar a tu perro, no dejes que se seque al aire. Como son pequeños, los chihuahuas pueden perder calor corporal y enfriarse con mucha rapidez. Seca a tu chihuahua con una toalla apenas termines de bañarlo.
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   Limpia los ojos de tu chihuahua. Es posible que en ocasiones tu chihuahua tenga secreción alrededor de los ojos. Utiliza un paño suave para limpiar con delicadeza la zona alrededor de sus ojos y eliminar la secreción. Algunos chihuahuas también pueden tener manchas de lágrimas en esta zona.

   • Puedes conseguir productos especiales para quitar las manchas de lágrimas en la tienda de mascotas local.
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   Limpia las orejas de tu chihuahua. Sus orejas están propensas a ensuciarse, así que para limpiarlas, debes colocar en una bola de algodón una cantidad pequeña de solución limpiadora específicamente preparada para perros. Utiliza la bola de algodón para limpiarle las orejas, pero no la introduzcas a tanta profundidad como para perderla de vista. Limpia únicamente hasta la profundidad de tu primer nudillo.

   • Límpiale las orejas en caso de que huelan mal o haya cerumen.
   • No utilices un hisopo para limpiarle las orejas a tu chihuahua, pues puede empujar el cerumen, la suciedad, etc. a una mayor profundidad.
   • Puedes aplicar una cantidad pequeña de aceite de coco o para bebé en los bordes de sus orejas en caso de que parezcan secas.
   • Tu veterinario puede recomendarte una buena solución de limpieza para orejas.
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   Recórtale las uñas a tu chihuahua. Las uñas de los chihuahuas tienden a crecer con rapidez, de modo que es importante recortárselas con frecuencia. Bastaría con una vez cada pocas semanas para evitar que crezcan tanto al punto de tocar el piso.

   • Si no te sientes a gusto cortándole las uñas a tu chihuahua, considera la posibilidad de llevarlo donde un especialista o el veterinario para que realice el trabajo.
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   Cepíllale los dientes a tu chihuahua. Las razas de perro pequeñas como los chihuahuas tienden a padecer problemas dentales. Por lo tanto, es necesario practicar un cuidado dental regular para mantener la salud de sus dientes. Si es posible, cepíllale los dientes varias veces a la semana.

   • Sería ideal que comiences a cepillárselos cuando sea un cachorro para que se acostumbre al proceso. Un chihuahua más viejo probablemente se resista más al cepillado.
   • Asegúrate de utilizar un cepillo de dientes y dentífrico específicos para perros.
   • Si no te sientes a gusto cepillándole los dientes a tu perro, puedes pedirle al veterinario que lo haga. No obstante, una limpieza dental veterinaria requiere anestesiar a la mascota, lo que puede ser muy costoso.
   • La boca pequeña de tu chihuahua no permite que sus dientes se desarrollen apropiadamente. Quizás tu veterinario necesite retirar varios dientes para dejar más espacio para que los restantes se desarrollen de manera adecuada.
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   Revisa el cuerpo de tu mascota. El acicalamiento es la oportunidad perfecta para revisar el cuerpo del chihuahua en busca de alguna anomalía, como bultos, golpes o señales de inflamación (p.ej., enrojecimiento, hinchazón). Si observas alguna anomalía, programa una cita con tu veterinario a fin de que se encargue de realizar un examen físico completo y te brinde un diagnóstico médico.

   • Revisar el cuerpo de tu chihuahua con frecuencia puede ayudarte a detectar los problemas a tiempo, cuando puedan tratarse con facilidad.
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Parte 3

Parte 3 de 6:

Brindarle cuidado veterinario preventivo

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   Desparasita a tu chihuahua con regularidad. Los parásitos pueden provocar mucho dolor en tu chihuahua e incluso pueden hacer que su vida corra peligro. Por ello, lo mejor es llevarlo al veterinario y desparasitarlo con regularidad. La frecuencia con que deberás hacerlo depende de su edad.

   • Los medicamentos desparasitantes no prevendrán todos los tipos de parásitos. Aún existe la posibilidad de que tu chihuahua tenga tenias, tricocéfalos y otros parásitos pese a los desparasitantes que le brindes.
   • Existen algunos desparasitantes de venta libre que puedes comprar en las tiendas de mascotas o en Internet, pero lo mejor es que consultes con un veterinario para así darle a tu perro el mejor cuidado preventivo.
   • Cuando tu chihuahua sea un cachorro, asegúrate de desparasitarlo a los 6, 8, 10 y 12 meses de edad.
   • Durante la adultez, desparasítalo dos veces al año.
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   Vacuna a chihuahua. Independientemente de que tu chihuahua sea un cachorro o tenga 10 años, es necesario que le administres las vacunas correspondientes cuando sea necesario. Los chihuahuas cachorros requieren muchas más vacunas que los adultos. Las vacunas “principales” (parvovirus canino, distémper canino, adenovirus canino tipo 2 y rabia) son recomendables para todas las razas de perros.

   • Las vacunas no principales (enfermedad de Lyme, leptospirosis y muchas otras) son opcionales. Los factores tales como la salud de tu mascota y la ubicación geográfica son determinantes en la susceptibilidad que pueda tener a las infecciones.
   • Vacuna a tu chihuahua contra el parvovirus cuando tenga 5 semanas de edad.
   • Vacuna a tu chihuahua contra la rabia cuando tenga 12 semanas de edad.
   • Tu chihuahua debe recibir al menos una vacuna combinada varias veces cuando es cachorro y cada 1 a 3 años en la adultez. Las vacunas contra la parainfluenza o la bordetella brochiséptica pueden administrarse durante las mismas visitas al veterinario.
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   Esteriliza o castra a tu chihuahua. Por lo general, esta es la opción más responsable y también aumenta la calidad de vida de tu pero. Si tu chihuahua es hembra, llévala al veterinario para que la esterilicen cuando tenga entre 2 y 3 meses de edad. Si es macho, llévalo a castrar entre los 2 y 6 meses de edad.

   • La esterilización elimina toda posibilidad de embarazo o cáncer de ovario, reduce el riesgo de sufrir tumores mamarios y detiene el ciclo de calor.
   • La castración disminuye la tendencia de tu perro a vagar o a ser agresivo, aumenta su concentración y previene o reduce las probabilidades de que tenga una variedad de problemas de salud tales como hernias e infecciones a la próstata.
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Parte 4

Parte 4 de 6:

Ejercitar a tu chihuahua

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   Haz que tu chihuahua se ejercite con moderación. Los chihuahuas son animales que tienen mucha energía. Si tienes un perro adulto, puede sorprenderte la cantidad de energía que tiene para correr y jugar. No obstante, es importante reconocer que los chihuahuas gastan su energía en ráfagas cortas y no por medio de un ejercicio constante.

   • Los paseos cortos son una buena forma de ejercicio para tu mascota. Los chihuahuas son propensos a sufrir de colapso traqueal, así que cuando lo pasees utiliza un arnés en lugar de una correa tradicional.
   • Ten en cuenta que ejercitar al chihuahua en exceso puede provocarle una lesión. Finaliza la sesión de ejercicios antes de que tu mascota se canse.
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   Programa sesiones de juego frecuentes con tu chihuahua. Otra buena forma de ejercitar a tu chihuahua es mediante las sesiones de juego frecuentes. Los chihuahuas adoran jugar a traer objetos, así que puedes practicarlo con tu mascota durante las sesiones de juego. Si tienes un patio trasero enrejado, puedes dejar afuera a tu chihuahua para que persiga las ardillas.

   • Programa la mayor cantidad de sesiones de juego razonablemente posibles. Intenta jugar con tu perro a la misma hora cada día.
   • Evita salir a jugar con tu chihuahua durante un clima caluroso. Si lo sacas a jugar, mantén un recipiente con agua fría y fresca cerca para evitar que se deshidrate.
   • Supervisa a tu chihuahua mientras juega afuera. Su tamaño pequeño puede hacerlo una presa fácil para los halcones y otras aves de presa. Además, esta es una raza muy curiosa, lo que puede llevarlos a escapar si se presenta la oportunidad.
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   Lleva a tu chihuahua a un parque para perros. Dejar que tu chihuahua corra y juegue en un parque como este no solo es un ejercicio excelente, sino que también le permitirá interactuar con otros canes. Asegúrate de que tu chihuahua haya socializado antes de llevarlo a un parque para perros. Si no está acostumbrado a rodearse de otros perros, podría volverse hostil o incluso agresivo con ellos.

   • Los chihuahuas olvidan que son pequeños y se defenderán de un perro más grande si se presenta la oportunidad.
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Parte 5

Parte 5 de 6:

Entrenar a tu chihuahua

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   Inscribe a tu chihuahua cachorro en un jardín de infantes para cachorros. Si tienes un chihuahua cachorro, inscríbelo en un jardín de cachorros para que le enseñen los conceptos básicos de las interacciones apropiadas con los demás perros. Como los chihuahuas pueden ser muy hostiles con los demás perros, exponerlo a ellos cuando aún es cachorro le permitirá sentirse más a gusto y ser más amigable cuando sea mayor.
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   Inscribe a tu chihuahua adulto en una clase de entrenamiento de obediencia. Las clases de obediencia son adecuadas apenas tu chihuahua deje de ser un cachorro y en ellas podrá aprender a convertirse en un perro adulto con buena conducta. Estas clases le enseñarán a seguir las órdenes básicas (p.ej., “siéntate”, “quieto”) y lo ayudarán a sentirse más cómodo al interactuar con otros perros y personas.

   • Los chihuahuas son muy inteligentes y aprenden rápido.
   • Los chihuahuas también pueden ser obstinados de vez en cuando, por lo que debes tener paciencia y firmeza cuando lo entrenes.
   • Si las clases de obediencia no son una alternativa práctica para ti, puedes enseñarle tú mismo a sentarse, quedarse quieto, que venga cuando lo llames y a echarse. También puedes enseñarle a usar la correa.
   CONSEJO DE ESPECIALISTA

   

   Pippa Elliott, MRCVS

   Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios

   La Dra. Elliott es una veterinaria con más de 30 años de experiencia. Se graduó en la Universidad de Glasgow en 1987, y ha trabajado como cirujana veterinaria durante 7 años. Después, la Dra. Elliott trabajó como veterinaria en una clínica de animales durante más de una década.

   

   Pippa Elliott, MRCVS
   Veterinaria del Colegio Real de Cirujanos Veterinarios

   Pippa Elliot, veterinaria licenciada, resalta la importancia del entrenamiento: "Los chihuahuas son pequeños, pero tienen el mismo impulso y motivación que un pastor alemán o un rottweiler. Así como no dejarías pasar el entrenamiento de obediencia en estas razas grandes, tampoco debes hacerlo para un chihuahua solo porque sea una raza pequeña".
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   Entrena a tu perro a ir al baño. Al igual que con los demás entrenamientos, este es relativamente sencillo. Llévalo afuera con frecuencia y regularidad para que aprenda que no debe hacer sus necesidades en la casa. Por ejemplo, los chihuahuas cachorros deben salir después de comer, jugar, tomar la siesta y antes de dormir.

   • Si tu chihuahua hace sus necesidades en la casa, limpia el desorden sin armar un alboroto. Frotarle la nariz en sus desechos o castigarlo de manera física o verbal no le enseñará a no repetir la acción, por el contrario, te temerá.
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   Establece las reglas básicas. Si no está bien entrenado, tu chihuahua podría convertirse en un pequeño horror. Además de las clases de obediencia, es necesario establecer las reglas básicas en tu casa para evitar que tu mascota se convierta en un tirano rebelde. Por ejemplo, puedes establecer el lugar donde dormirá y cómo deberá esperar su comida.

   • Un chihuahua que no conoce reglas básicas puede llegar a ser sumamente mimado y muy exigente, sin ningún deseo o incentivo para comportarse como es debido.
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   Haz que tu chihuahua socialice. Es esencial que hagas que tu chihuahua socialice. Es mejor hacerlo durante su juventud, pues mientras más pequeño sea, más probabilidades habrá de que al crecer se convierta en un adulto completo. Si bien podrá aprender habilidades de socialización en el jardín de cachorros y las clases de obediencia, también puedes hacer que socialice por tu cuenta exponiéndolo a personas, entornos y sonidos nuevos.

   • Los chihuahuas tienden a ser muy cautelosos con los extraños. Cuando le presentes a personas nuevas, permite que inicie la interacción para reducir la probabilidad de que les tema.
   • Al presentarle a tu chihuahua a un niño, este último no debe acariciarlo ni darle bocadillos en un principio. En primer lugar, deja que tu chihuahua se acerque y se sienta cómodo con el niño, y luego permite que este lo acaricie con suavidad y le dé un bocadillo.
   • Los objetos extraños pueden causarle terror a tu chihuahua. Cuando hagas que tu mascota socialice con objetos nuevos en su entorno, comienza a una distancia lo suficientemente lejana para que se sienta a salvo mientras mantiene su curiosidad. Acércate con lentitud a medida que tu chihuahua se sienta más a gusto.
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Parte 6

Parte 6 de 6:

Estar atento a los problemas de salud de tu chihuahua

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   Infórmate sobre los casos de luxación patelar. Los chihuahuas, al igual que otras razas de perros, son propensos a una variedad de problemas de salud. La luxación patelar, en la que patela (rótula) se desplaza fuera de lugar, es un problema ortopédico común en los perros muy pequeños. En ocasiones, la patela regresa a su lugar por sí sola, pero en los casos graves es necesario realizar una cirugía para colocarla nuevamente en su posición.

   • La luxación patelar puede producirse a causa de saltar sobre los muebles y desde ellos. Establece una regla básica que consista en impedirle saltar de esta manera a tu chihuahua.
   • Las señales físicas de esta condición física son dolor, entumecimiento y “saltos de conejo” al correr.
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   Familiarízate con las enfermedades neurológicas en los chihuahuas. Los chihuahuas pueden ser propensos a desarrollar una enfermedad neurológica conocida como “hidrocefalia”, un defecto congénito en el que el líquido cefalorraquídeo se acumula en el cerebro y ejerce presión en él. Si tu perro padece esta enfermedad, su cabeza parecerá hinchada. No existe cura para la hidrocefalia, pero es posible reducir la presión con la ayuda de esteroides y una derivación quirúrgica para desplazar el líquido desde el cerebro hacia el abdomen.

   • Una fontanela abierta es otro problema neurológico en los chihuahuas. Se produce cuando las placas óseas del cráneo no se fusionan por completo. Esto da como resultado un punto blando en la parte superior de la cabeza.
   • Tu chihuahua puede vivir una vida normal con una fontanela abierta, pero deberás tener mucho cuidado cuando juegues con él. Los juegos bruscos pueden aumentar el riesgo de lesión en la cabeza, lo que podría ser mortal para un chihuahua con esta afección.
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   Investiga sobre los problemas cardiorrespiratorios en los chihuahuas. Los chihuahuas pueden ser propensos a varios problemas cardiacos y respiratorios. Por ejemplo, estos perros pueden desarrollar soplos al corazón, los cuales pueden diagnosticarse con la ayuda del veterinario. La gravedad de los soplos al corazón varía, pero en ocasiones pueden controlarse mediante cambios en la alimentación y los hábitos de ejercicios.

   • Los chihuahuas pueden tener una predisposición genética al colapso traqueal, en el cual los anillos traqueales pierden su rigidez. Los collares para perros tradicionales pueden provocar un colapso traqueal en los perros pequeños.
   • Si tu chihuahua se cansa con facilidad o tiene problemas para respirar, podría tener un problema cardiaco o respiratorio. Llévalo donde un veterinario para que lo sometan a un examen médico completo.
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   Infórmate sobre la hipoglucemia. La hipoglucemia, o un nivel bajo de azúcar en sangre, puede ser un problema para los perros pequeños, como los chihuahuas. Las señales de esta afección son: movimientos lentos, apatía, temblores y escalofríos. Los casos graves de hipoglucemia pueden provocar convulsiones, coma y una posible muerte.

   • Si tu chihuahua presenta señales de esta enfermedad, puedes frotarle miel sin procesar debajo de su lengua o en sus encías como una medida de primeros auxilios.
   • Si tu chihuahua tiene hipoglucemia, llévalo al veterinario de inmediato.
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Consejos

• Los refuerzos positivos (p.ej., elogios verbales, bocadillos, tiempo de juego adicional) te ayudarán a entrenar con mayor eficacia a tu chihuahua. Estos perros no reaccionan bien a los castigos verbales o físicos.
• Los chihuahuas no toleran muy bien el clima frío. Por eso, es mejor que le pongas un suéter cada vez que lo saques a pasear durante un clima frío.
• Los chihuahuas viven durante 12 a 20 años, lo que te brinda un tiempo largo para establecer una relación sólida con tu mascota.
• Debido a la lealtad que tu chihuahua te tiene, puede ser un excelente perro guardián. No obstante, asegúrate de entrenarlo y hacer que socialice para que no sea demasiado defensivo cuando esté cerca de tus amigos o familiares.
• Los chihuahuas no son muy adecuados para las familias que tienen niños pequeños o perros grandes, pues existe un gran riesgo de juegos bruscos.

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Advertencias

• Estos perros son propensos a sufrir enfermedades y problemas ortopédicos que podrían requerir una atención veterinaria costosa.
• Los chihuahuas pueden morder cuando se sienten atemorizados o están a la defensiva. El entrenamiento y la socialización adecuados pueden reducir las probabilidades de que tu chihuahua muerda a las personas.
• Darle comida humana a tu chihuahua puede provocarle obesidad, lo que podría dar lugar a otros problemas médicos.

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